En la entrega de su segundo presupuesto como canciller (miércoles 22 de noviembre), Philip Hammond anunció una financiación del gobierno del Reino Unido de más de 340 millones de libras esterlinas para impulsar las ventas de coches eléctricos y para desarrollar nuevas regulaciones para los coches sin conductor. El Canciller confirmó que la ambición del Gobierno es crear “el marco regulador más avanzado del mundo para los coches sin conductor”, con una fecha límite de vialidad de 2021. Según GlobalData, una empresa líder en datos y análisis, el año pasado la población total de vehículos eléctricos en el Reino Unido alcanzó los 33.400 vehículos. Tras los anuncios de ayer, la compañía estima que esta cifra se cuadruplicará hasta alcanzar los 120.000 coches eléctricos en 2020, lo que representa una tasa media de crecimiento anual del 37,4%.
Panos Emmanouilidis, Analista Senior de GlobalData, comentó: “Hemos revisado nuestras estimaciones de ventas de vehículos eléctricos para el Reino Unido al alza, basándonos en el anuncio del presupuesto de ayer de que el gobierno, con el apoyo financiero de la industria, gastará 440 millones de libras esterlinas en investigación y desarrollo de infraestructuras y otros 100 millones de libras esterlinas para ofrecer descuentos a las personas que compren vehículos eléctricos hasta 2020.
El reto sigue siendo que las ventas de vehículos eléctricos siguen dependiendo en gran medida de los beneficios fiscales y del apoyo financiero del gobierno, por lo que la ampliación hasta 2020 es una buena noticia. Cuando se elimina este apoyo, como ocurrió en Dinamarca el año pasado, las ventas de vehículos eléctricos muestran un rápido descenso”. En 2016, el gobierno danés decidió eliminar gradualmente los incentivos financieros para la compra de vehículos eléctricos y, como consecuencia, según las estimaciones de GlobalData, las ventas podrían caer hasta un 45% en 2017. Esto contrasta con un aumento de casi el 80% en las ventas de vehículos eléctricos en la vecina Suecia y un aumento medio del 30% en toda la Unión Europea durante el mismo periodo en el que muchos gobiernos han mantenido sus subvenciones. El Canciller del Reino Unido también reveló que se eliminará el impuesto sobre los beneficios en especie por cargar un coche eléctrico en el trabajo.
Emmanouilidis añadió: “El lanzamiento de vehículos eléctricos más asequibles en los próximos tres años, en combinación con el apoyo del gobierno del Reino Unido, hará que los vehículos eléctricos sean más atractivos para los automovilistas británicos y aumentará la demanda. El anuncio clave en el presupuesto fue la inversión en infraestructura de 400 millones de libras esterlinas que proporcionará muchos más puntos de recarga. Sin una red de recarga adecuada capaz de satisfacer la creciente demanda de vehículos eléctricos, los automovilistas seguirán dudando en invertir en esta tecnología”.
